Aliento y más aliento ante la adversidad
Banfield necesitó tocar fondo para darse cuenta de donde estaba realmente parado, los jugadores comenzaron a meter, correr y pelear la pelota como si fuera la última y llegó el triunfo con Racing.
La huida de Da Silva nuevamente nos puso en un lugar complicado, y el partido ante Godoy cobró esa relevancia en todos, o se continuaba con la levantada o se volvía a perder y la problemática aumentaba.
El público del taladro asumió el rol correcto, primero copó Avellaneda para acompañar la levantada. Ayer el Florencio Sola fue fiesta, cuando Godoy nos embocó continuó alentando y en el final reconoció el desgaste y lo que pusieron los jugadores.
Estamos peleando el descenso, ya todos los sabemos hace rato, el hincha de Banfield comenzó a vivir cada partido como una final y le pone aliento a cada parada que el taladro necesite superar. Así va a ser difícil que nos bajen de primera.