El estadio abrirá sus puertas a las 12.00, después de un control policial en la totalidad de las instalaciones a los efectos de verificar la posible existencia de material prohibido que ponga en riesgo la integridad de los asistentes.
La APREVIDE recomienda a los espectadores concurrir temprano para evitar aglomeraciones en los ingresos.
Además el servicio contará con el apoyo de cámaras de seguridad en el interior y adyacencias del estadio, que serán monitoreadas desde una sala de audio y video.
Se utilizarán puestos de test de alcoholemia, identificación digital de personas, canes rastreadores de estupefacientes, detectores de metales y policía motorizada para los acompañamientos de parcialidades.
No se permitirá el acceso de papeles en ninguna de sus presentaciones, tampoco el ingreso de banderas con frases agraviantes o lesivas, ni la utilización de material pirotécnico que pongan en riesgo la salud y vida de las personas.
Para el público de Rosario Central se otorgarán 3.000 entradas generales, y 500 plateas. Telám