Allanamientos y suspensión de elecciones en AFA

Afa banfieldTodo estaba demasiado calmo a menos de un mes para las elecciones presidenciales en la entidad, previstas para el 18 de octubre próximo, cuando al mismo tiempo, un juez determinó el allanamiento del edificio, al igual que el de las oficinas del presidente de River Plate, Daniel Passarella, y de los ex dirigentes de esa institución José María Aguilar y Mario Israel; un club de la Liga Santafesina, Colón de San Lorenzo, logró que una jueza provincial suspenda los comicios de la AFA por noventa días para estudiar la posibilidad de que cerca de tres mil afiliados puedan votar por un nuevo presidente del fútbol argentino, y al mismo tiempo, el presidente de Vélez Sarsfield, Fernando Raffaini, adelantó que su lista cuenta con los siete avales necesarios para presentarse para competir con el anciano mandatario Julio Grondona.
El allanamiento de la División de Defraudaciones y Estafas de la Policía Federal a las oficinas de la AFA y a las casas y oficinas de Passarella, Aguilar e Israel, así como a la oficina de la consultora KPMG, fue ordenado por el juez Claudio Bonadío a partir de una acusación formulada por el abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten, por sospecha de fraude en la venta de jugadores, balances mal confeccionados en River Plate y para verificar el destino del dinero que ingresó a la entidad por el programa "Fútbol para todos", en tanto que deslizó que en esta y la anterior conducción pudo haber habido "lavado de dinero".


Sánchez Kalbermatten se refirió también al "estrecho vínculo entre Aguilar y Julio Grondona, permitiendo que River fuera beneficiado económicamente con préstamos, anticipos a cuenta de la televisión y a cambio de esto, el ex presidente de River operó a favor de la continuidad de Grondona en la AFA".


El abogado insistió en que "personas allegadas a Grondona y Aguilar intervinieron en las ventas de Gonzalo Higuaín, Javier Mascherano, Javier Saviola, Pablo Aimar y Maximiliano López" y que el ingreso de dinero al club "fue inferior al que hubiese correspondido" debido a un supuesto lavado de dinero.
Sánchez Kalbermatten también dice que Grondona "presionaba a Passarella para que no hiciera una auditoría contra Aguilar para evitar ser investigado él también" y que de hecho "hasta hoy sigue sin aparecer la auditoría de KPMG" y que el presidente de la AFA "maneja a su antojo los programas de ‘Fútbol para todos', beneficiando y perjudicando a quienes él quiere".


El abogado reveló que existen cuentas bancarias en Luxemburgo a nombre de la hija de Israel y de la de Aguilar y que este vive varios meses al año en Suiza al formar parte de la Comisión de Abogados de la FIFA. "Todo el mundo sabe que River se fue al descenso y que hubo vaciamiento pero nadie lo había llevado a Tribunales", sostuvo Sánchez Kalbermatten, quien aclaró que en el caso de Passarella, la acusación es por "inacción" contra la anterior comisión directiva del club.


Por su parte, Passarella emitió un comunicado en el que mostró su disposición para colaborar con la policía en los allanamientos y remarcando que en su gestión inició acciones legales "de carácter patrimonial" contra Aguilar e Israel por 4,5 millones de dólares y una querella penal por sobreprecios en la construcción del museo de River, y otra causa por adulteración de documentación y defraudación "por abuso de confianza contra una cooperativa financiera que operaba con el club en la gestión anterior".
Más tarde, y en el mismo día, la jueza Gladys López dictó la medida cautelar de suspender las elecciones de la AFA, previstas para el 18 de octubre, por noventa días a partir de una denuncia del club Colón de San Lorenzo, de la provincia de Santa Fe, que se ve perjudicado como la gran mayoría de los tres mil afiliados a la entidad madre del fútbol argentino del interior del país, debido a que en los comicios solo pueden votar cuarenta y nueve representantes.
Si bien esta decisión podría revocarse de aparecer un tribunal superior, y que varios dirigentes cercanos a Grondona adelantaron que apelarán este fallo, la decisión judicial se inscribe dentro de la movida del empresario Daniel Vila, a su vez presidente de Independiente Rivadavia, para que cambie el sistema eleccionario y tengan participación todos los clubes afiliados sin excepción.


El presidente de Argentinos Juniors, Luis Segura, calificó de "disparate" la movida de Vila, al sostener que en la Argentina "hay distintas realidades, y suponer que hay tres mil clubes en igualdad de condiciones para tratar intereses comunes en el fútbol es absurdo. Ni el mismísimo (Leon) Trotsky lo hubiese propuesto. Es una subestimación a la inteligencia. Los reclamos de Colón deben ir a la Liga Santafesina, que es la afiliada, y en cambio la AFA recibió una medida precautoria de un club no afiliado y eso es una invitación a la anarquía".
Pero si ya esto parecía mucho, llegó la cereza del postre cuando el presidente de Vélez, Fernando Raffaini, adelantó que una lista en la que participa cuenta con los avales necesarios (siete) para presentarse como alternativa a Grondona en los próximos comicios.
Si bien Raffaini no dio los nombres de los clubes que participan en la citada lista, que sería oficializada el martes, se especula con que, además de Vélez, serían All Boys, Belgrano de Córdoba, Independiente, Newell's Old Boys y dos clubes del ascenso, aunque luego podrían sumarse otros.
Sería la segunda vez que en una elección, Grondona tiene en contra una lista opositora porque en 1991 se presentó como candidato el ex árbitro Teodoro Nitti, quien obtuvo un único voto que fue el propio.
Raffaini responde políticamente al dirigente de la provincia de Buenos Aires Martín Sabbatella, de centroizquierda, e integró la lista de diputados, en el octavo lugar, en una colectora del candidato oficialista Daniel Filmus.
Se especula que aún en el caso de ganar las próximas elecciones y entrar en su noveno mandato, debido a sus problemas de salud, Grondona derivaría gran parte de la conducción de la AFA en los dirigentes Germán Lerche (Colón), Nicolás Russo (Lanús), Luis Segura (Argentinos Juniors), Mario Contreras (Godoy Cruz) y, en caso de ganar los comicios de su club, Carlos Portell (Banfield).


La gran pregunta es si realmente le conviene al Gobierno nacional de Cristina Fernández de Kirchner seguir apoyando a Grondona, cuando el posible candidato opositor también le responde políticamente, incluso con un perfil más cercano y cuando aceptaría continuar con el programa "Fútbol para todos", aunque distribuyendo los ingresos de los clubes de otra forma.


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