Fiel a las raíces que forjaron su florecimiento esta joven agrupación continúa transitando el camino que desde su mismo comienzo se propuso recorrer. Es así que desde entonces fue recibiendo personas que reúnen las mismas intenciones y propósitos que concibieron los cimientos de la 1896. En este clima nuestras genuinas ideas no encuentran horizontes para fluir y, de ese modo, nuestros sueños parecen no ser tan lejanos. Sueños que, sin lugar a dudas, enriquecerán a nuestra institución.
La sinceridad, el esfuerzo, el trabajo, la dedicación, la perseverancia, la humildad, la honestidad, son algunas de las cualidades que sintetizan a la personalidad de los integrantes de la agrupación La 1896. A la vez que son los parámetros indispensables para poder formar parte de ella.
En este año que hemos transitado todas las personas que gradualmente se han ido incorporando a la agrupación tienen gravado a fuego las cualidades antes mencionadas y, por ello mismo, han sido recibidas en forma fraterna e incondicional. Todos son indispensables, pues, en definitiva, somos un producto derivado de la sumatoria de nuestro integrantes.
Un grupo homogéneo y enteramente comprometido y dedicado se ha constituido en el Club Atlético Banfield bajo la forma de agrupación que con orgullo lleva por nombre LA 1896. A un año de nuestra irrupción en el mundo Banfield el orgullo que por ello sentimos es difícil de ocultar y por tal razón, en esta oportunidad, aprovechamos a saludar y felicitar a todos los que integramos esta agrupación. Y en honor a la verdad, ¿porqué ocultarlo? ¿deberíamos hacerlo? El esfuerzo y el sacrificio que todo este proceso demandó, desde su inicio hasta la realidad actual, impide soslayarlo y, por el contrario, nos empuja orgullosamente a exteriorizarlo. Y por añadidura a expresar lo siguiente: acá estamos, recordando nuestros orígenes para no desviar nuestro rumbo y mirando hacía el futuro.