El tridente ofensivo del taladro no está fino en la definición y no puede concretar las opciones del gol que se presentan, en los últimos partidos los delanteros tuvieron muchísimas situaciones desperdiciadas frente al arco rival.
Jugando en el Lencho, Banfield busca constantemente encontrar la ventaja, no especula, su intención es ganar cuanto antes para adueñarse del partido y romper los esquemas rivales, cuando no lo logra va al frente hasta las últimas consecuencias, y si está empatando, parece que estuviera perdiendo. Algo que celebramos, que nos ha dado muchas más satisfacciones que tristezas. Bajo la premisa de ganar, es de vital importancia la contundencia para hacer efectiva la idea, por eso, cuando no marca sufre más de la cuenta, son los riesgos de ser un gran equipo con vocación ofensiva. De visita su objetivo también es ganar, pero son otros contextos en donde los rivales ponen lo mejor de si y juegan como si fuera una final.
En este febrero lluvioso, los artilleros tienen la pólvora mojada, Andrés Chávez no grita desde el 25 de noviembre del 2013, si bien fue operado y no estuvo en los últimos 2 partidos, durante 3 fechas disputadas en este año, no pudo encontrar la red pese a tener muchas oportunidades, incluyendo un penal malogrado ante Almirante. Andrés casi convierte en varias ocasiones, ante Sportivo el palo le negó el gol y de haber tenido mejor fortuna hoy estaríamos hablando de otra cosa. No hay que preocuparse y esperemos gritar fuerte sus goles en está semana. Recordemos que no está jugando en su posición habitual y eso parece condicionarlo.