La figura del partido fue el Seba Fernández, apareció en dos oportunidades como un gran goleador: en el lugar y el momento justo. Dos rebotes y una muy buena anticipación ante el arquero cuencano fueron sus armas para anotar 2 goles a su cosecha personal y a la goleada del taladro. Movedizo, inquieto, hambriento de gloria... "papelito" se destacó y tuvo un rol fundamental para volver locos a los defensas rivales durante todo el partido.