Desilusión
El comienzo de una etapa nueva y las incorporaciones generaron mucho entusiasmo, pero en cambio durante los 90 minutos se vio muy poco para ilusionarse, la reprobación final tuvo que ver con el descontento de esa ilusión desmoronada. Fue un golpe bajo y seguramente ante Vélez comienza un nuevo camino, hay mucho por corregir, el aliento va a estar.