El equipo no podía aguantar a Godoy Cruz que tenía un hombre menos, y los mendocinos supieron leer el mensaje, a estos le ganamos, habrán pensado, y fueron a la carga. En Banfield no hubo respuestas y el desorden, la imprecisión y el poco criterio lo hicieron parecer un equipo de otra categoría.
En fin, pobre realidad la del taladro, Méndez tiene los días contados y se viene Racing en el cilindro, jugando así vamos a tener muchos problemas, el sábado nos vemos en Avellaneda a partir de las 20.10 hs, para ver que sucede y esperar por la levantada, aunque con poca confianza de que eso suceda.