"intentamos hablar con el árbitro y nunca pudimos, nosotros somos un equipo muy correcto y sólo pedíamos explicaciones, Lunati nos miraba, se reía y nunca nos dio explicaciones de nada", "al final lo de Ramírez no se le puede escapar, sabemos quien fue el agresor, pero no lo vamos a decir".
Luego Julio Cesar enumero las acciones que perjudicaron al taladro, y sobre el rival sostuvo, " nos convirtieron dos goles y pese a que fuimos superiores durante todo el segundo tiempo, ellos convirtieron y ganaron bien".
Sobre el funcionamiento del equipo el emperador reconoció, "teníamos proyectados otras expectativas, nos sentimos muy mal con todo eso, no podemos levantar cabeza desde la eliminación de la copa, pero hay que seguir y ganar el próximo jueves"
Para finalizar, se le preguntó si continuaría en Banfield o emigraría a Boca, "en la semana hablamos de eso si quieren", cerró.